La operación, que continúa abierta, comenzó en agosto del año pasado en la lonja de A Coruña.
En una inspección rutinaria, los agentes de la Policía Autonómica y del Servicio de Guardacostas detectaron una serie de documentos de transporte del Principado de Asturias.
A partir de ahí iniciaron una investigación en la que acabaron por identificar a un grupo de furtivos de la zona de Ferrol que extraían ilegalmente percebe y lo introducían en la lonja empleando documentos de una Cofradía de Asturias.
Para realizar las comprobaciones necesarias, la Policía Autonómica se puso en contacto con la Consellería de Desarrollo Rural y Recursos Naturales del Principado de Asturias, que señaló que hay más de 8 años que esos documentos no se empleaba y en los que no reconocieron las firmas.
Las cinco toneladas de percebe que se introdujeron con estos documentos tienen un valor medio en lonja de 110.000 euros.