Mato explicó que el Ayuntamiento está manteniendo su compromiso de colaborar en la medida del posible, duplicando el número de personas del equipo de limpieza que trabaja en el centro, pese a que la retirada de la suciedad provocada por los trabajos, no es responsabilidad municipal.
También insistió en que la Administración local tiene el deber de realizar las labores de limpieza comunes, pero no aquellas derivadas de unas obras que generan residuos, de los que deben hacerse cargo los responsables de las mismas.
El problema más grave reside en que el personal enviado por el Ayuntamiento se encontró esta mañana con que, áreas del edificio que ya habían limpiado, volvían a estar cubiertas de polvo, haciendo inútil su trabajo por causas ajenas.
Desde ese servicio le trasladaron al alcalde que lo óptimo sería que la obra se abordara por fases bien definidas, para poder limpiar áreas concretas en las que los trabajos estuvieran totalmente finalizados y poder reabrirlas sin peligro de que se volvieran a manchar.
Sin embargo, se encuentran con que se está actuando en puntos muy diferentes al mismo tiempo, lo que les dificulta, o mismo les impide, hacer correctamente la tarea.
Mato, durante la visita que realizó acompañado por el concejal Antonio Golpe, pudo ver que no se tomaron las medidas adecuadas para que la suciedad no alcanzara ni el mobiliario, ni el material escolar que estaba depositado en muchas dependencias, con el que se pueden ver máquinas, material de construcción y basura mezclados con juguetes, libros, mesas o sillas.
El alcalde incidió en que para que la colaboración sea efectiva, es necesario que la Consellería se implique en atajar un problema que se prolongará mientras duren los trabajos.