Los policías trataron de localizar al conductor y a los posibles ocupantes, pero no pudieron observar a nadie ni en el interior del coche ni en las cercanías. Al tiempo que realizaban estas actuaciones, llegó al lugar dos dotaciones de los bomberos del Ayuntamiento, que ya habían sido avisados desde el 092 nada más tenerse conocimiento del siniestro.
Varios efectivos iniciaron una actuación de urgencia por si había habido alguien en el interior del vehículo, mientras sus compañeros comenzaron a lanzar espuma.
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