Recordó que desde julio de 2021 está en vigor en Ferrol un contrato para dar servicio a las personas con dependencia, el Servicio de Ayuda en el Hogar (SAF), con un presupuesto de alrededor de más 5 millones de euros anuales, lo que supone cerca del 90 % de la partida anual del área municipal que dirige. Este contrato tiene una duración de dos años, prorrogables anualmente hasta un máximo de otros dos (2+1+1), por lo que en julio de este año comenzaría la primera prórroga, de obligado cumplimiento, apuntó, “puesto que estamos hablando de un servicio esencial”.
La edil estuvo acompañada por el representante de CCOO del sector de las trabajadoras del servicio de ayuda en el hogar, Luis Ruedas. El aumento de la inflación registrado en los dos primeros años de contrato “también está afectando a la prestación de servicios”. En el caso del SAF, además, explicó que el colectivo de trabajadores “no tiene convenio en Galicia, por lo que sus incrementos salariales serían, a priori, los marcados por el IPC, muy elevado en la actualidad”. Esto, dijo, pone en “peligro a viabilidad de un servicio esencial puesto que está dirigido a un sector especialmente vulnerable y prestado mayoritariamente por mujeres”. En este sentido, denunció que el aumento acorde con el IPC que solicita el sector “recaería en los ayuntamientos cuando las competencias corresponden al gobierno autonómico”.. Explicó que en la actualidad el precio total es de 17,25 euros/hora, del que este año la Xunta aporta un máximo de 11,5 euros/hora, el usuario alrededor de 2 euros/hora y el resto los ayuntamientos. La inflación generó “un problema económico para todas las partes”, explicó, por lo que reclamó a la Xunta que “busque una fórmula que permita aumentar de manera puntual y temporal alrededor de un 4 % el precio total de la hora y que asuma esa diferencia para permitir la continuidad y viabilidad del servicio”