El túnel de la calle Nueva de Caranza se reabrió este mediodía al tráfico rodado y se prevé que el paso de vehículos esté permitido durante un mes, hasta que se acometan las obras de canalización pendientes por parte de Telefónica. La medida se adoptó tras un encuentro mantenido esta mañana por la concejala de Urbanismo, Blanca García, con la dirección de obra en el que la edil incidió en la necesidad de encontrar una solución apropiada mientras se ejecuten los trabajos, que pasaría por habilitar un bypass que conecte el barrio de Ultramar ya que, en el momento en que se vuelva a cerrar el túnel para acometer la canalización y demoler el paso, significará que estará un mínimo de cinco meses cerrado al tráfico.
Esta es una petición reiterada por la Administración local en diversas ocasiones y para la cual, no se obtuvo respuesta por el momento por parte del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana.