Los portavoces de los grupos municipales han alcanzado un acuerdo mayoritario con el objetivo de agilizar para agilizar los tiempos en las intervenciones durante la celebración de los plenos. Este pacto pretende conseguir que las sesiones sean más fluidas, sin caer en las reiteraciones, lo que evitaría que se tengan que cancelar los plenos por exceder el tiempo recogido en la normativa con la consiguiente repetición de la sesión en días posteriores.
El modelo que se aplicará a partir de ahora es el mismo que el del Parlamento de Galicia, en el que el tiempo de la primera intervención está estipulado en 10 minutos mientras que a las réplicas les corresponden 3.
Uno de los grupos más críticos con esta medida es el BNG. Los nacionalistas recuerdan que fue su propuesta al inicio del actual mandato cuando este gobierno decidió derogar las limitaciones impuestas por el Partido Popular, que tenían como objeto, sostienen, censurar los debates plenarios y convertirlos, dicen, en la procesión de los caladiños. Jorge Suárez indica que, efectivamente, no estaban de acuerdo con la limitación de los tiempos pero que la diversidad de formaciones políticas y la experiencia le obligan, ahora, a fijar una limitación.
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