El pleno municipal celebrado el pasado jueves en Fene llevaba entre sus puntos a propuesta de la alcaldía para modificar la ordenanza fiscal nº 22, reguladora de la tasa por la ocupación de terrenos de uso público por mesas y sillas, tribunas, tablados y otros elementos análogos, conocida comúnmente dentro y fuera de Fene como "ordenanza de las terrazas" que grava anualmente la instalación de estos equipamientos en las aceras.
El Ayuntamiento ya había acordado suspender el cobro para el período abril-diciembre del año pasado y ahora lo vuelve a hacer con efectos para el 2022, de cara a facilitar la recuperación económica de la hostelería, uno de los sectores más afectados por la pandemia.
El asunto fue apoyado por los cuatro grupos municipales. La decisión se adopta, en primer lugar, como manera de apoyar la actividad de bares, cafeterías y restaurantes en un contexto en que los cambios en los niveles de restricciones siguen ocasionándoles pérdidas, aunque en este momento tengan la posibilidad de llegar al 75% de ocupación en el interior sin servicio en barra y sin que los grupos superen las 6 personas no convivientes, además de poder atender el 100% en las terrazas, con un máximo de 10 personas que no vivan juntas por mesa.
Sin embargo, la medida también se toma pensando en el que pueda pasar en el futuro y en el hecho de que el sector aún continúe en los próximos meses sometido a limitaciones.
Tal y como se indica en la propuesta, y a la vista de que el virus sigue propagándose, "no parece que la hostelería vaya a recuperar a corto plazo la situación de normalidad anterior".
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